(Cuando la imaginación me lleva hasta Bernardos, siento una profunda emoción. Es mi pueblo)
Los fríos y las calores;
mieses, ovejas y cerdos;
la pizarra seca y dura…
Añoranzas y recuerdos.
Las jotas y el paloteo.
La majestad de unas gentes
que te acogen con franqueza
y transparencia en las frentes.
La familia, los amigos…
Nos agrada recordar
a aquellos que nos mostraron
un camino por andar.
Quiero estar dentro de ti.
Tus afueras, visitar.
Recorrer tus viejas calles.
De tus aires, disfrutar…
Santa Inés y el río Eresma;
las canteras y el Castillo.
El Abajo, Peña Mora,
el depósito, el pocillo…
La plaza, el Ayuntamiento,
Constanzana, Cañamares,
Padrastro y Humilladero,
barbechos, viñas, pinares…
Todo me llena, me invade,
me evoca buenos momentos.
Me siento bien cuando vivo
tus sitios y tus adentros.
Luis Arranz Boal